En la entrevista con WIRED, el filósofo Keith Frankish expone sus ideas sobre el concepto de ilusionismo en la conciencia, sugiriendo que la conciencia tal como la percibimos podría no ser más que una ilusión creada por nuestro cerebro. Según él, lo que consideramos nuestras mentes conscientes son simplemente modelos distorsionados de nuestros procesos sensoriales y reactivos. Además, Frankish cuestiona la existencia del «problema difícil» de la conciencia, argumentando que la ciencia no puede abordar este fenómeno porque solo maneja lo observable públicamente. Propone, por tanto, una revisión radical de cómo la ciencia interpreta la conciencia.
Exploración del Ilusionismo
¿Qué es el Ilusionismo?
El ilusionismo es una teoría filosófica que argumenta que la conciencia humana es una percepción errónea o una ilusión, no un fenómeno separado y tangible. Frankish destaca que nuestra comprensión de la conciencia como un reino privado y distinto es una simplificación engañosa de procesos más complejos que ocurren en nuestros cerebros.
El Problema Difícil y la Ciencia
Frankish destaca el llamado «problema difícil» de la conciencia, que se refiere a la dificultad de explicar cómo las experiencias subjetivas y fenomenológicas surgen de procesos físicos. La ciencia, orientada a lo empíricamente verificable, enfrenta limitaciones al estudiar un fenómeno que es intrínsecamente privado y subjetivo.
Futuro de la Inteligencia Artificial y la Conciencia
Perspectiva de Frankish sobre las Máquinas Conscientes
Frankish propone una aproximación pragmática hacia la creación de inteligencia artificial (IA). En lugar de enfocarse en replicar la conciencia, sugiere diseñar máquinas basadas en las funciones requeridas. La creación de «conciencia» en máquinas no debe ser un fin en sí mismo, ya que es un concepto amplio y ambiguo. Recomienda centrarse en capacidades específicas que desean replicarse de la biología.
Otros Puntos de Vista
Pietro Perconti, otro experto, opina que las máquinas podrían ya estar mostrando signos de un tipo de conciencia, adaptado a sus capacidades y funciones. Argumenta que, dado su diseño y objetivos, las máquinas podrían tener una «conciencia» diferente, adaptada a su entorno tecnológico.
Consejos para Emprendedores y Negocios
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Innovar Basado en Funciones, No en Conceptos: Al desarrollar productos o servicios, especialmente en tecnología, céntrese en las funciones necesarias en lugar de en conceptos vagos como la “conciencia”.
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Adaptabilidad y Flexibilidad: Asegure que sus desarrollos sean capaces de adaptarse y modificar sus funciones según las necesidades emergentes del mercado.
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Colaboración Multidisciplinaria: Integre conocimientos de diferentes disciplinas (computación, neurociencia, filosofía) para enriquecer la comprensión y el diseño del producto.
- Revisión Periódica de Objetivos y Métodos: Dada la naturaleza cambiante de la ciencia y la tecnología, es crucial revisar regularmente los objetivos y métodos, asegurando que sigan siendo relevantes y efectivos.
Conclusiones
La discusión sobre la conciencia y su existencia como entidad separada o como ilusión genera importantes reflexiones sobre cómo abordamos el diseño e implementación de inteligencia artificial. Experimentos futuros y desarrollos en IA deberán tener en cuenta estos debates filosóficos, ya que influyen en cómo conceptualizamos y finalmente construimos sistemas autónomos avanzados. La clave está en diseñar con un firme entendimiento de las funciones requeridas y una mente abierta sobre lo que la «conciencia» puede significar en diferentes contextos.